Las sensaciones se
entremezclan ante los momentos. Las penas atragantan la garganta ante las
falsas palabras, los silencios se hunden bajo la tierra.
Lagrimas que ya no logran
deslizarse por las mejillas, porque la pena interior es grande y recae ante el
abismo de las ilusiones.
Mirar a la cara con
inocencia no sirve para enfrentar el obstáculo, las mentiras aparecen desde la
alfombra y la desilusión crece ante un amor que será eterno, único, ser padres,
ser amigo, no es fácil, los caminos muchas veces se llenan de piedrecilla que
van haciendo cicatrices.
La eterna juventud no existe, el tiempo no lo podemos
detener y los años pasaran sin perdón, son los principios que yacen desde la
cuna los que te harán una buena persona, detente ahora que hay tiempo y puedes
corregir los pequeños errores de adolecente. No pienses que estas sola…detén un
poco el carro de tu tren para ver que la vida es con altos y bajos, que los
momentos son instantes y que el amor esta siempre a tu lado.
Sigue soñando y deja la
humedad de tus ojos para cuando
realmente sea un dolor eterno, sobreponte a cada caída…la vida es bella a pesar
de las lágrimas que corren por tu pequeño rostro aun…aprende a ser fuerte,
aprende a superar tus propias debilidades y veras que el mundo es de colores.
Todos fuimos jóvenes
soñadores que algún momento detuvimos el tren de la vida para ver más allá,
pero nos volvimos a subir al camino de la vida y veras que aquí seguimos…quizás
ahora conduciendo nuestros propios destinos.
Nunca dejes de soñar sin
importar la edad.
2018 – 06 – 26
Maru Parodi o Caballo
Negro – Chile
Derechos reservados de
autor.
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