Reflotar

Reflotar

El viento con su ráfaga nos  llevan muy lejos,

donde los sueños el  tiempo  lo envolvió un aliento

sin aviso, quedando en una eternas quimeras,

los pensamientos, sentimientos, proyectos

la mente se fusión entre las letras y la música,

lo que podía ser real ante una historia

mas que sub realista, donde los tic- tac

quedaron tan suspendidos

como las pocas hojas que quedan del invierno.

Por ahora no existe  tiempo, solo momentos

que creamos y pintamos día a día, siendo todos

un artista de un  lienzos como principiantes

hasta grandes viviendo este extraño suspenso.

Entre la soledad obligada por el humano

hemos descubierto muchos quienes  somos,

esa caja de pandora que abrió sus propias puertas

para adentrarse en los misterios de nuestras propias vidas,

nos hemos abrazo a nosotros mismos solo por el amor

de no perdernos de nuestro propios yo,

lagrimas, risas, sueños, recuerdos

son algunos de las pocas emociones

que nos revuelven la mente noche y día.

Llega un momento en que la nostalgia

nos llego a todos de una u otra forma

en el despertar de una noche común a un mundo extraño,

dejándonos viviendo en un espacio paradójico

que  ya no es imprescindible lo que era tangible.

Solo dejemos que el reloj de sus vueltas maniáticas,

en cualquier momento volveremos a esa nueva era

que no existirá  edad, color, raza ni culturas

intercambiando lenguas aprendidas en el encierro

amistades que se fueron y otras que siguen atadas

a ese corazón que jamás ha perdido su latido.

Debemos seguir amando la vida cada segundo

he iremos lentamente moviéndonos

para retomar ese caminar perdido detenido por este virus,

que nos disipó entre las redes para poder existir,

sigamos haciendo mil artes para reflotar desde las cenizas,

no olvidemos nunca a esas criaturas
que dejaron olvidadas las noticias.

2020 – 7 – 6

Maru Parodi o Caballo Negro – Chile

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